El cohete de la empresa SpaceX sufrió dos explosiones en sus primeras pruebas de lanzamiento, pero el magnate se mostró optimista de cara al tercer vuelo, el cual podría realizarse dentro de pocas semanas.
El cohete Starship, el más potente de la historia de la carrera espacial, fue el protagonista de los eventos de la empresa SpaceX durante el 2023, tanto por la explosión en la primera prueba en el mes de abril como el exitoso despegue de noviembre luego de que la compañía espacial de Elon Musk hiciera reformas tanto en la plataforma de lanzamiento y en la nave.
El primer intento ocurrió el 20 de abril en la base espacial de SpaceX en Boca Chica, en el sur de Texas, Estados Unidos. Si bien el cohete despegó con éxito, la nave explotó minutos después.
El proceso ya había sufrido inconvenientes y la fecha de lanzamiento tuvo que posponerse un día luego de que los técnicos de la empresa de Elon Musk detectaron fallas en una válvula de presurización. Incluso, en la nueva fecha estipulada, el lanzamiento se detuvo 40 segundos antes para luego reanudar los planes.
Luego del despegue, el cohete experimentó “un rápido desmontaje no planificado” y, tras elevarse 39 kilómetros, la nave comenzó a rotar sin control y explotó cuatro minutos después del lanzamiento sobre el Golfo de México. Debido a esto, Starship no pudo llegar a órbita en la fase de separación, pero se resaltó que superó con éxito las etapas más críticas del lanzamiento.
El CEO de la empresa, Elon Musk, había indicado que Starship sería el vehículo indicado para enviar humanos a Marte por primera vez. Estaba previsto que el vehículo volara durante 90 minutos en la órbita de la Tierra, terminando cerca de Hawai, donde debía sumergirse en el Océano Pacífico de forma tal que pudiera ser reutilizado.
El éxito llegó recién en noviembre, cuando se realizó el segundo vuelo de prueba y SpaceX logró tres hitos inéditos: en el despegue funcionaron esta vez el total de los 33 motores de Starship, la plataforma de lanzamiento no sufrió los tremendos daños del primer intento y se separaron correctamente sus dos módulos —el enorme propulsor Super Heavy y la nave en sí, la Ship 25— casi tres minutos después de iniciado el vuelo.
Elon Musk reveló qué pasó con los vuelos del Starship
Ahora, Elon Musk reveló qué pasó con las pruebas del Starship. El magnate puntualizó que el objetivo era lograr que el cohete pasara la etapa de puesta en escena. Tras la etapa superior, la nave encendió sus seis motores Raptor y continuó su ascenso al espacio.
Se detalló que el propulsor Super Heavy explotó momentos después cuando comenzó a funcionar para guiarse hacia un aterrizaje controlado en el Golfo de México, algo que se deberá corregir.
«Con el Vuelo 1, el objetivo no era volar la plataforma e idealmente conseguir cierta distancia, lo cual hicimos. Con el Vuelo 2, teníamos que pasar la fase de preparación, por lo que logramos el objetivo de pasar la fase de preparación y casi llegar a la órbita», indicó Elon Musk.
En la segunda prueba, el cohete continuó volando hasta unos ocho minutos y se rompió en el espacio, sobre el Golfo de México. Esto sucedió menos de 30 segundos antes de que se apagaran los motores de Starship, momento en el que la nave habría acumulado suficiente velocidad para alcanzar su trayectoria planificada. Luego, la nave habría vuelto a entrar en la atmósfera y amerizado cerca de Hawaii.
Al respecto de lo sucedido, Musk detalló: “La razón por la que en realidad no llegó a la órbita fue que ventilamos el oxígeno líquido, y el oxígeno líquido finalmente provocó un incendio y una explosión. Queríamos ventilar el oxígeno líquido porque normalmente no tendríamos ese oxígeno si tuviéramos una carga útil. Irónicamente, si tuviera una carga útil, habría alcanzado la órbita”.
Musk se mostró optimista de cara al tercer vuelo de prueba de Starship, el cual podría realizarse dentro de tres semanas, y sostuvo que SpaceX tiene «muy buenas posibilidades de alcanzar la órbita».